Fotografía de Darvín Romero Montiel
Y me fui.
Y comencé a despertar.
BPN
Un mar de leva me acerca su tormenta
a mi lado llega anidando el desconsuelo
afuera el mundo encadenado al miedo
tan lejos como siempre los unos de los otros
como si no bastará con todos los odios con los que
lidiamos
los
amores distantes macerando la impaciencia
la
casa tirada en la banqueta cansada de silencio
la guitarra
el
verso
la
risa
temerosas de buscarme por miedo al vano arpegio
y qué hace uno si la vida agoniza en las esperas
si el canto de los grillos ya no es tan melodioso
si el frío de la noche no invita a la calma con el
amor desnudo
si la tristeza se burla del candil que ensaya su
luz de flama doliente.
Como otra muerte nos llega la despedida del
poeta
su silencio termina por derrumbar las paredes de
nuestra calma
la casa está más abandonada y marchita
cuando se muere un poeta es como si todos los
maizales se quemaran
y no hay canción para sanar tantas heridas.
La noche es una balsa buscando el regreso a la
península
para
beberse el mar de los años
de
un solo trago las ausencias
desde lejos llega una brisa salobre con su lluvia
medrosa sin alas de gaviotas
y la voz del poeta pringando en la memoria ahíto de
versos
La
península es nuestro cuerpo
La
isla que ruge
Nuestro
cuerpo que pasa
La
península es el adiós
De
las aguas del Caribe
florecen los abrojos y vuela por el aire el eco del
tiempo
el mandato de un ángel con todas las palabras en
las alas
y llega otra vez el arbolario con su gritería
esplendida
nos acerca sus poemas con la camisa afuera
con toda la vida risueña en su palabra
y
un sol de bríos
para quemar de crepúsculos el lomo de las olas
como si el fin de los tiempos no existiera
y la muerte se aleja con lo más oscuro del olvido
y yo me quedo celebrando el otro nacimiento
el mío en la soledad de la casa que vuelve con su
canto
y
el del poeta que ruge
lanzando su anzuelo de cielo ¡azulito y bello!
desde la eternidad verdecita de los mangles
porque a un poeta
se le resucita leyéndolo.
Andrés Castillo
Caracas, agosto de 2020.