Julio Cortázar
Algo hay en el café
que desborda tu aroma,
me desvela y te pienso
volviéndome adicto a tu siembra.
Algo hay en el café
siempre puntal me convoca
en la tarde que llega
o en las madrugadas con lluvia
alertando
a la piel
que es la hora perfecta.
La cafetera resuena
hirviendo sobre la hoguera
como
mis manos
como mi lengua.
Algo hay en el café
que me desborda en la mesa
con el deseo sagrado de tus piernas.
Algo hay en el café
que me desvela,
yo aquí
buscando tu cuerpo,
tu beso
tu
silueta,
en el fondo de la taza no hay mensaje
apenas ausencia.
Poema de Andrés Castillo