Encuentro

PALABRAS,SILENCIOS,AMORES, COMBATES, TRIUNFOS Y DERROTAS, NOSTALGIAS, AUSENCIAS.
DE FLORES Y BALAS COMO LA VIDA.
Poética existencia. Vida poética.

jueves, 20 de septiembre de 2018

Para amar a una mujer

Necesitas pocas cosas:

















Muchas lunas y soles.
Algo de canto y cielo.
Besos como mares que se desborden sin miedo.
Ríos de ternura, cascadas de dedos que lleven en su corriente balsas de misterio, peces con luces y sortilegios.
Para amar a una mujer debes ser atento, como el bosque al ruido cantarino de la noche, tejer telarañas de delirios para que no se te escapen los deseos más sentidos.
Cuida siempre que seas tú la más confiable certeza. 
No traiciones, ni mientas, ni hieras.
Oye, oye cada palabra como si aprendieras un nuevo alfabeto. Ella siempre será inédita como la luna que de sus sueños cuelga, luna que en cada noche de sus pechos llega.
Arrópala de tu fuego cuando la nieve acobarde las cienes y calma sus miedos con la seguridad de tu voz y la fiereza de tu sangre.
Edifica con ella la casa, la fuente del saber compartido, la cuna de los retoños, la hoguera y el nuevo camino.
Vuela con ella. 
Canta con ella, sálvala siempre de oscuros precipicios. 
Construye con sus manos la pasión y el delirio para las horas de tormentas.
No dejes nunca de sentirte compañero, amigo y siempre el nuevo aventurero desconocido.
Alimenta su braza, inventa futuros caminos, viaja con ella y regresa tomado de su entrega sagrada.
Nunca olvides que puedes ser su puente movedizo o el camino firme para viajar unidos.
Amala, ama, como ella te ama.
Para amar a una mujer necesitas pocas cosas.
Porque el amor es alma y latido no instrumento cautivo.
Para amar a una mujer tienes que atreverte a ser vuelo, cielo y destino compartido.

Poema de: Andrés Castillo