Encuentro

PALABRAS,SILENCIOS,AMORES, COMBATES, TRIUNFOS Y DERROTAS, NOSTALGIAS, AUSENCIAS.
DE FLORES Y BALAS COMO LA VIDA.
Poética existencia. Vida poética.

miércoles, 21 de enero de 2015


Me niego 

Me niego a caminar más rápido si no lo necesito.
Me niego a acelerar el vehículo como si la ciudad fuese un autódromo, como si el automóvil es una máquina para aplastar transeúntes.
Me niego a mirar a la gente con desconfianza.
Me niego a creer que todos nuestros  semejantes son seres agresivos, peligrosos, de temer.
Me niego a dejar de mirar el cielo y sus misterios, ese que sigue ahí, encima de los edificios con sus miedos.
Me niego a pensar que la vida fallezca en un ir y venir enloquecido.
Me niego  a dejarme llevar sin pensar por lo menos a donde nos dirigimos.
Me niego al silencio del conformismo.
Me niego a convertirme en mercancía.
Me niego a enclaustrar la ternura en gestos de ira.
Me niego a leer mil palabras por minutos, si lo que quiero es leer lento, ser leído, en cada trazo, en cada escrito, en cada huella del camino.
Me niego a matar la alegría que cabalga en un saludo.
Me niego a fulminar la sonrisa que anda herida por las calles.
Me niego a ser rehén de alguna jauría enloquecida.
Me niego a comprar y comprar y comprar y comprar.
Me niego a mandar mensajes electrónicos, si es en tus manos donde quiero escribir lo querido.
M niego a creer que la vida es así y hay que admitirlo.
Me niego a  dejar el camino, para volar veloz, pero sin vivir la alegría del recorrido.
Me niego a tantas cosas, me niego.
Me niego a morir sin haber vivido la vida que he querido.


Palabras de Andrés Castillo

martes, 20 de enero de 2015

El árbol de la dignidad

A sus 95 años de vida inmensa.


                                  A Marcos Ana
“Decidme cómo es un árbol.
Decidme el canto de un río,
                        cuando se cubre de pájaros”.

La celda cerró sus puertas
en ella un hombre anochece
afuera algún silencio
alguna algarabía pálida
descubre sus versos.

Desde el agujero
la luz engarza con la vida
desde la rama de un árbol
llegan los alientos del sobreviviente
que canta al sol que no ve.

La muerte es esquiva
necia que llega
degollando las risas
de un hombre sangrado y roto
que sueña besos y bosques.

La dignidad tiene una llave
con alas de cristofué
la dignidad tiene una llave sagrada
por donde suele volar la esperanza,
la dignidad no conoce cautiverio,
la dignidad es un árbol que crece
poblado de pájaros
que nos cantan por dentro.

El hombre anochece
imaginando el árbol de sus alas
imaginando la libertad que no conoce
imaginando el beso que ha perdido
entre las ramas del olvido.

Para saber cómo es un árbol
hay que tener sed de pájaros
hay que tener sed de hojas
y el corazón de viento
hay que sudar flores
hay que soñar cantos
y raíces en las manos.

Sólo quien pierde un árbol
sabe llorar sobre el ala rota.

Decidme tu hermano
como llegamos a la sombra de tu arado
como surcamos el árbol del perdón
sin la sangre de lo odiado.

Oye, hermano
el árbol de la dignidad nos cobija
amando  la primavera
que hoy es beso en tus mejillas.

Oye, hermano
el rumor del vuelo
que llega,
la dignidad es un árbol florecido
que ilumina siempre tu camino.


Poema de Andrés Castillo

viernes, 16 de enero de 2015

Me pregunto



"Los seres humanos somos culpables de muchos
desastres en este mundo.
Pero los seres humanos seguimos siendo la esperanza"
Hugo Chávez

“No me gusta definirme con las palabras,
prefiero que lo hago mi conducta”
Alí Primera


            ¿Y si hacemos realidad cada palabra? ¿La de aquellos soñadores que partieron antes? ¿Las de aquel gigante esclarecido? ¿El mismo que hizo camino y verdad viejos anhelos, llenando de bullicios los silencios? ¿Sembrando el rojo clavel como justicia? ¿Regando su sudor cual lluvia fresca, para que la tierra de todos brote limpia?

            ¿Y si en su nombre, creamos una comuna en cada sueño y una revolución en cada gesto, forjando en la conducta nuestro rostro, la primera palabra que nos nombre?

            ¿Y sin en cada paso, dejamos una huella, ya no para el recuerdo, sino para el viajero, para el camino que otros han de seguir, sin cercas de hastío y pesimismo?

            ¿Y si todos en noble jauría, salimos a sembrar los campos muertos, a limpiar de abrojos nuestros sueños a dar nuestras manos sin recelo?

            ¿Y si quienes hacen la canción se van por los senderos? ¿Por los barrios y poblados, los más lejanos caseríos, compartiendo alegres sus guitarras con los sencillos sembradores? ¿Olvidando efímeros aplausos y autorías, regresando al tiempo de combates, donde hacer la canción era un trabajo, trabajo antiguo y colectivo?

            ¿Y si volvemos a la sencillez de añejos días y festejamos la vida en cada beso, compartiendo el pan y los poemas, si esperar el cumplido lisonjero?
            ¿Y si bebemos la lluvia de caricias y nos reímos del niño y sus locuras, esa que perdimos torpemente, por querer ser otro, distinto al que nacimos?

            ¿Y si quien hace su trabajo, cualquiera que este sea, el más pequeño o el más erguido, se enamora de sus días y enloquecido, trata de hacer feliz al peregrino, resolviendo con diligencia las angustias de quien espera su palabra y un abrigo?

            ¿Y si amamos a la gente por su causa, por su amor repartido en colectivo, por su noble pensar y su ternura, por su solidaria tarea de cada día, de cada despertar comprometido?

            ¿Y si rezamos haciendo el rezo huella y amamos a Dios en cada niño, en cada mujer, en cada hombre, en cada niña que sufre injustamente la feroz mirada indiferente, esa que entierra en su dolor la prepotencia cruel de no ser gente?

            ¿Y si olvidamos odiar al semejante, pesando que la vida es pasajera, que es el amor siembra y semilla de la vida que brota en una estrella?

            Me digo ahora mientras hablo, con el ave cantora de los días, que estas palabras que derramo sean la camisa que me cubre, sean el sombrero y limpio cielo, que si abandono la ternura, de nada importa tanta tinta, tanto luchar en cofradía, mejor morir ahogado en los olvidos, en la lápida oscura que no basta, para enterrar en ella hipocresías.

            Vamos pues yo voy contigo, soy tu celoso guerrillero, guíame tú, no hay jerarquías, en cualquier puesto de combate, lanzaré mi sangre y mi conciencia por defenderte a ti con tu alegría, por la defensa de todos los que luchan, porque la vida sea nuestra libre y buena, sea de verdad la Siempre Vida, esa que tú, luchas y sueñas.

            Me pregunto y salgo al camino.  

Andrés Castillo




martes, 13 de enero de 2015

A tus pies






Te llevaré al mar y junto a las olas besaré tus huellas.



De Andrés Castillo

jueves, 8 de enero de 2015

.G






El punto “G”  
apenas una letra
la mujer amada
todo el alfabeto.




De Andrés Castillo

Obsequio




Te llevarè al campo 
para que veas 
el ramo de flores que ha de vivir para ti, 
es hermoso el colorido
mientras siga risueño en su jardìn.




De Andrès Castillo