Encuentro

PALABRAS,SILENCIOS,AMORES, COMBATES, TRIUNFOS Y DERROTAS, NOSTALGIAS, AUSENCIAS.
DE FLORES Y BALAS COMO LA VIDA.
Poética existencia. Vida poética.

viernes, 5 de abril de 2013

Marzo doliente infinito


 A Maria Gabriela Chavez



                                                                              Dos poemas de Andrés Castillo



Marzo doliente infinito

Ayer murió un amigo
digo ayer y no sé cuánto tiempo
llevo llorándolo por dentro.

Ayer murió un amigo
dicen que de una rara enfermedad
nada extraña a los odios que la engendraron,
dice que él se llevó en su cuerpo
todo el mal que no pudieron
sembrarle a su pueblo.

No volví a verlo sonreír
y eso que siempre lo sentimos cerca
como la más tierna certeza porvenir,
Cristo redentor dijeron los pueblos
y era cierto.

Mi amigo era fuerte y querendón
terco muchacho que no dejó de pelear
contra molinos y vientos grotescos
bailaba y reía como nosotros,
pocas veces lo vi llorar
aunque ríos de lágrimas
lo ahogaban por dentro.

Eso sí, cantaba horrendo
las canciones más hermosas
las más queridas,
esas canciones
que jamás escucharemos
cantada con la voz
del que ama sin miedo.

¡Cuanto lo recuerdo!

Sólo el dolor de los amigos
a nuestra propia muerte
es comparable a lo que sentimos
cuando se nos marchan ellos.

Ayer murió un amigo
hoy salí a la calle
a intentar olvidar su muerte
buscando encontrar en la brisa
su voz de tierno gigante,
brisa que aún no me despierta
de la pesadilla de su ausencia,
en la calle
encontré multiplicado el mismo rostro
ese que ayer dejé pegado al espejo del baño
con mi cara de tumba,
enterrada en la fiera impotencia
del tiempo que nos engulle.

Rostros de millones,
hombres y mujeres vueltos uno
que deambulan ahora por el mundo
intentando disecar la tristeza de su adiós
intentando vengar en silencio
la vida de todos que ha muerto.

Ayer murió mi amigo
y vaya que me duele
como duelen los sueños que dejó
como duele el futuro sin sus ojos
como duele otra vez
el mundo a merced del poderoso
riendo en su festín
sin la voz del gigante que lo espante,
sin la voz que tantas veces los dejó sin ropajes.

Aquí estoy ahora
sentado en los escombros del dolor,
hija mía, perdona mi tristeza
me cuesta reír y cantarte ahora
y eso que lo intento,
me siento sólo otra vez
aunque te tenga amada,
tú eres todo para mi
y él era todo
para el que nadie amaba,
sin embargo tu risa
anuncia también su alborada
todas sus noches de insomnio
en ti amanecen felices amada.

Si me vez triste hija mía
es porque ayer murió un amigo
como yo
anda mucho pueblo ahora,
abrázame tú, dame razones
para seguir creyendo en lo bueno
en lo tierno,
en lo noble que muchos ayer escupieron,
me atrinchero en tu beso
anclado en tu mar ingenuo,
mientras mis ganas incendian la rabia
mientras el pueblo encuentra sosiego
para volver al camino de nuevo.

Ayer murió un amigo,
hay tristeza, rabia, dolor
furia, incendio.

Ayer murió Hugo Chávez
y en su nombre comienzo. 





Comandante
  
Yo no te digo adiós
menos que descanses en paz,
sigue en guerra,
en combate.

También hay cielos por liberar.




Poemas de Andrés Castillo



A UN MES DE TU SIEMBRA COMANDANTE CHAVEZ


 SIGUES HERMANO, HERIDO DE VIDA.

Hombre que mira el cielo

Mario Benedetti


Mientras pasa la estrella fugaz
acopio este deseo instantáneo
montones de deseos hondos y prioritarios
por ejemplo que el dolor no me apague la rabia
que la alegría no desarme mi amor
que los asesinos del pueblo se traguen
sus molares caninos e incisivos
y se muerdan juiciosamente el hígado
que los barrotes de las celdas
se vuelvan de azúcar o se curven de piedad
y mis hermanos puedan hacer de nuevo
el amor y la revolución
que cuando enfrentemos el implacable espejo
no maldigamos ni nos maldigamos
que los justos avancen
aunque estén imperfectos y heridos
que avancen porfiados como castores
solidarios como abejas
aguerridos como jaguares
y empuñen todos sus noes
para instalar la gran afirmación
que la muerte pierda su asquerosa puntualidad
que cuando el corazón se salga del pecho
pueda encontrar el camino de regreso
que la muerte pierda su asquerosa
y brutal puntualidad
pero si llega puntual no nos agarre
muertos de vergüenza
que el aire vuelva a ser respirable y de todos
y que vos muchachita sigas alegre y dolorida
poniendo en tus ojos el alma
y tu mano en mi mano

y nada más
porque el cielo ya está de nuevo torvo
y sin estrellas
con helicóptero y sin dios